Con el objetivo de compartir los conocimientos y buenas prácticas sobre la respuesta a la crisis generada por el COVID-19 en materia de carreteras, la Asociación Mundial de la Carretera (PIARC) ha organizado una serie de webinars en el que han participado países de todo el mundo. Algunos de estos países ya han sido fuertemente golpeados por el virus, como España, Italia, EEUU o China, mientras que otros están todavía en la fase inicial de propagación, como Colombia, Argentina o México.
La situación a día 15 de abril se resume en casi dos millones de casos confirmados y casi 125.000 muertos (OMS). De manera desagregada, la siguiente figura muestra los diez países con mayor número de muertos y de casos confirmados.
Centrándonos en materia de carreteras, todos los países han experimentado un significativo descenso de la movilidad a medida que el COVID-19 se ha extendido en su territorio. Como ejemplo, en España la movilidad de vehículos ligeros y pesados ha descendido hasta un 90% y un 50%, respectivamente. En la misma dirección, Argentina ha observado como el transporte por carretera de vehículos motorizados ha descendido un 95%, lo que ha provocado un incremento significativo del uso de la bicicleta como vehículo de transporte individual. En el caso concreto de los Emiratos Árabes, además de observar como la movilidad descendía en un 85%, ha prohibido la circulación de vehículos entre las 20h y las 6h.
En todas y cada una de las intervenciones de los distintos representantes de cada uno de los países que han participado en estas jornadas, se destaca el importante papel de la carretera como infraestructura esencial para el abastecimiento de bienes de primera necesidad (alimentos y productos sanitarios).
Relacionado con el transporte por carreteras de alta capacidad, algunos países, como China, Colombia o Argentina, han eliminado de manera provisional el peaje para minimizar contagios y contribuir a la economía del país, convirtiendo algunas de estas carreteras en vías de peaje en sombra. Asimismo, otros países han determinado esencial ofrecer servicios y facilidades a los transportistas de manera que se han establecido ciertas áreas de servicio como esenciales.
También es interesante insistir en este punto de la importancia del uso de tecnología inteligente de transporte (ITS) y sus sistemas cooperativos, como por ejemplo los sistemas de pago con tecnologías QR o NFC, para luchar contra futuras epidemias y pandemias. Las nuevas tecnologías están ya implantadas en muchos sectores y no debe asustarnos hacer uso de ellas en el transporte. Tenemos el deber de adaptarnos a ellas y emplearlas para facilitar la vida de las personas y avanzar como sociedad.
En cuanto al transporte público, la mayoría de los países han reducido su oferta. Adicionalmente, países como Argentina y Paraguay han ido más allá y han decidido suspender el transporte de media y larga distancia. Otros países, como Chile y los Emiratos Árabes han restringido su uso exclusivamente a aquellas personas que se dirijan al trabajo y han limitado el número de pasajeros. Por último, se debe destacar que en España, Argentina o México se han establecido medidas concretas de distanciamiento social para proteger a los conductores de este tipo de transporte.
En cuanto a los profesionales del sector de la carretera, todos los países coinciden en la importancia de fomentar el teletrabajo y definen el mantenimiento y la conservación de las carreteras como una actividad esencial para el buen funcionamiento del país. En este sentido, se propone evitar lo máximo posible el contacto entre operarios y minimizar las aglomeraciones. Adicionalmente, cada uno de los países ha priorizado las obras que se están llevando a cabo con el fin de que continúen ejecutándose aquellas que se consideran urgentes y paralizar aquellas que no lo sean.
Finalmente, me gustaría resaltar, como muchos de los ponentes han hecho, que el mundo ya no será el mismo después del COVID-19. En este sentido, la economía no puede estar por encima de la vida de las personas.
Como conclusión, las ideas clave sobre el COVID-19 y las carreteras son:
- La movilidad por carretera ha descendido un 70-95%.
- El transporte de mercancías por carretera es fundamental para el abastecimiento de bienes de primera necesidad.
- Es necesario facilitar el transporte de mercancías por carretera mediante la eliminación provisional de peajes y disminuyendo los controles a los vehículos pesados.
- Se debe fomentar el uso de ITS y sistemas cooperativos.
- Se debe facilitar el trabajo de los transportistas.
- El transporte público debe reducir su oferta, pero debe garantizar el distanciamiento social.
- Es necesario proteger a los trabajadores del transporte público.
- El mantenimiento y la conservación de las carreteras es una actividad esencial para el buen funcionamiento del país.
- Se debe garantizar la seguridad de los operarios de conservación y mantenimiento de carreteras.
- Es imprescindible fomentar el teletrabajo de los profesionales del sector de la carretera.
- Se debe priorizar la ejecución de obras en carretera en función de su urgencia.
- El mundo ya no será el mismo después del COVID-19.
El contenido de las presentaciones de estos webinars las puedes encontrar en los links siguientes: